Tratado de Odontopediatría 2 Ts.

¡La simplicidad es complejidad resuelta!
Escribir un prefacio es una enorme responsabilidad para con la opinión pública representada por los lectores y los autores.
Ahora también en español, este libro tendrá una gran cantidad de lectores, que en cada edición pasa y pasará por adaptaciones y actualizaciones en sus protocolos de conductas, lo cual continuará a través de varias generaciones de alumnos de pregrado, especialización y postgrado.
La cantidad de personas involucradas en la elaboración de esta obra permite afirmar que pasó por el censo crítico de muchos, antes de ser presentado a los lectores. El rigor técnico y el grado de precisión tienden a llevar el libro muy próximo a lo ideal, no siendo apenas irreparable por tratarse de una obra humana que, por naturaleza, nunca logra reproducir la perfección propia de lo que es divino.
Yo valoro bastante quien escribe para el clínico, norteando y orientando diagnósticos, tratamientos y controles de los pacientes. Se habla mucho de Odontología Basada en Evidencias, pero no todas las evidencias científicas son clínicamente aplicables y no todas las evidencias y maniobras clínicas pueden ser comprobadas por los criterios científicos.
Explicar, metodizar, generar y exponer protocolos clínicos tiene una naturaleza propia de aquellos que quieren dar al prójimo lo que aprendió, perfeccionó y creó en su actividad clínica y de laboratorio en el contexto de un ambiente universitario abierto y orientado hacia el bien mayor de la sociedad que es el paciente y el clínico que lo acoge. ¡Sin esto nada tiene valor, pues serían solo números, métodos y criterios fríos almacenados sin ningún propósito mayor!
Este es un libro simple, fundamentado en la ciencia y en la práctica clínica, escrito por un grupo dedicado y riguroso para que el clínico pueda tener guías de conducta, orientación segura y plenitud en la tranquilidad al adoptar sus protocolos de tratamiento. Para el poeta Manuel Bandeira -lo difícil es ser simple-. Detrás de la simplicidad siempre hay mucho trabajo, dijo una vez la escritora Clarice Lispector. Y fue Constantin Brancusi, un intelectual rumano, que afirmó: la simplicidad es la complejidad resuelta.
En varios momentos, me encantó viajar en el saber de este libro. Jamás pensé en escribirle un prefacio, y ahora tengo este privilegio. Estimado lector: aproveche esta colección inteligente de conocimientos expuestos en cada detalle y fundamente cada vez más su práctica diaria de la Odontología.